El Gobierno de Ucrania asignó 100 millones de grivnas, o más de 7,7 millones de dólares, para la construcción de fortificaciones en la frontera con Rusia, escribe este lunes Rossiyskaya Gazeta.
El primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, precisó que es la inversión inicial en el proyecto, que constará de dos etapas.
En la primera, se construirán fortificaciones fronterizas en un tramo de 500 kilómetros que se encuentra en las regiones de Sumi, Járkov, Chernigov y, en parte, Lugansk. Durante la segunda etapa, después de terminadas las operaciones bélicas, habría que habilitar otro tramo de 400 kilómetros.
En la frontera terrestre habrá zanjas, terraplenes, fuerte iluminación, detectores de luz y movimiento, así como diversos dispositivos de vigilancia para impedir la entrada no autorizada de vehículos desde Rusia. También en la frontera marítima con Rusia se crearán fortificaciones y un sistema único de vigilancia óptica y electrónica para prevenir operaciones de desembarco.
En los orígenes del proyecto, según el periódico, estuvo el magnate Ígor Kolomoiski que, además de financiar el grupo de ultraderecha Pravy Sektor y el batallón Donbás, propuso en junio pasado instalar en la frontera con Rusia una valla eléctrica, con zanjas y minas.
Rossiyskaya Gazeta recuerda que EEUU asignó casi 3.000 millones de dólares en la construcción de una valla de seguridad que cubre hoy un tercio de su frontera de 3.200 kilómetros con México y tendrá que gastar en las próximas dos décadas otros 6.500 millones de dólares en el mantenimiento de las fortificaciones.
La "gran muralla" no ha frenado la inmigración ilegal que, según diversas fuentes, varía entre 400.000 y un millón de personas, pero sí ha multiplicado los accidentes letales entre los sin papeles que se ven obligados a usar las rutas más peligrosas para cruzar la frontera.
