Los bancos extranjeros retrasan el pago de los préstamos concedidos por entidades rusas. En agosto, la deuda vencida se disparó un 260% hasta sumar los 26.800 millones de rublos o unos 697 millones de dólares, incluidos los intereses. Los expertos dicen que este espectacular aumento se debe a las sanciones impuestas contra la banca rusa, escribe Vedomosti.
Según datos del Banco Central ruso citados por el rotativo, el mes pasado los bancos extranjeros no pagaron en el plazo un total de 99.400 millones de rublos ($2.581 millones), un 620% más que en julio, aunque gran parte de esta cantidad ya ha sido abonada.
"Normalmente, este tipo de demoras se deben a motivos técnicos como husos horarios diferentes. Sin embargo, un incremento tan drástico apenas se puede explicar de esta forma", señala Maxim Osadchi, analista del banco CFB.
Y es que los bancos más afectados por el aumento de los retrasos son VTB, Sberbank, Gazprombank y Rosseljozbank, entidades financieras rusas sometidas a las restricciones occidentales.
Curiosamente, ninguno de los cuatro se había enfrentado a problemas semejantes con el pago de los préstamos concedidos en los 12 meses anteriores.
Aunque la directiva de la UE sobre las sanciones no se refiere a los créditos interbancarios, los pagos pudieron retrasarse "por si acaso", opina un directivo de una entidad extranjera.
"Muchos bancos se quejan de que ahora los pagos a entidades que de algún modo, aunque indirecto, puedan estar relacionadas con las sanciones –es decir la práctica totalidad de los bancos rusos–, se revisan con lupa y tardan mucho más tiempo en transferirse", explica un ejecutivo de otro banco occidental.
