Rusia no suministrará los propulsores para el cohete Zenit que debía colocar en órbita el primer satélite geoestacionario ucraniano debido a la falta de pago, escribe hoy el diario ruso Izvestia.
"Consideramos que no tiene sentido alguno suministrar equipamiento para los Zenit hasta que no efectúen el pago, por cuanto la empresa está de hecho en bancarrota y no veríamos nuestro dinero", dijo una alta fuente de la agencia espacial rusa Roskosmos, citada por Izvestia.
El lanzamiento del satélite ucraniano Lybid (Cisne) estaba previsto para el verano pasado y, según el diario, la empresa ucrania Yuzmash que monta el cohete portador durante los últimos cinco meses intentó conseguir el suministro de los motores sin pago previo.
El diario destaca que Yuzhmash atraviesa una grave crisis financiera y en los últimos meses han abandonado la empresa unos 700 especialistas.
En opinión del experto ruso, consultado por Izvestia, próximamente también pueden quedar sin trabajo los empelados de Yuzhmash que se encargan de la modificación de los sistemas de cohetes P-36M YTTX, o PC-20B de acuerdo al Tratado START-1 (SS-18 Satan mod 4 según la clasificación de la OTAN).
La variante modificada del cohete, para adaptarlo a programas espaciales, lleva el nombre Dniepr y se emplea para satelizar pequeños aparatos espaciales de la empresa ruso-ucranio-kazaja Kosmotras.
"La parte rusa planteó el cambio a su favor de la parte económica del proyecto", dijo la fuente.
Añadió que "por ahora no está claro si nuestros socios ucranianos aceptarán la propuesta".
"Si llegamos al acuerdo, el programa Dniepr funcionará", señaló.
