La compañía húngara Evopro conjuntamente con el Centro de Nanotecnologías ruso comenzará a finales de octubre la producción de elecrobuses de materiales compuestos, informó este viernes el periódico Izvestia.
La fabricación de electrocares se realizará en la planta que antiguamente producía coches de la marca Moscovich. Los autobuses de materiales compuestos serán más ligeros, pues pesarán unas 5 toneladas, y permitirán ahorrar combustible.
Según informó a Izvestia la portavoz de la compañía Kompozit, Elina Bilevskaya, los primeros 50 vehículos serán enviados a Hungría, pero para el año 2016 se producirán electrobuses para Moscú también. La parte rusa se encargará de la fabricación de las carrocerías, pero si el nuevo producto recibe una buena acogida, toda la cadena de producción podrá montarse en Rusia.
Los especialistas consideran que estos medios de transporte son mucho más económicos que los autobuses convencionales y tienen más facilidades de maniobra, además por su peso menor dañan menos el pavimento.
En Moscú existen otros medios de transporte ecológicos que resultan más baratos que los electrobuses, tales como los tranvías y trolebuses. Se informa además que en la capital de Rusia pronto aparecerán trolebuses que funcionan de una pila recargable y no necesitan estar conectados a un cable durante la marcha.
