Después de ruidosos ataque en Facebook, donde la acusaron de "ganarse puntos" haciendo el bien y de ayudar a las milicias, la doctora Elizaveta Glinka (conocida popularmente como doctora Lisa) continúa asegurando que no ha visto tropas rusas rusas en Donbás, a donde ha hecho 16 viajes, informó este viernes el periódico Rossiyskaya Gazeta.
"No he visto allí tropas rusas, les guste escuchar eso a algunos o no les guste, hay milicias y tropas ucranianas que pelean entre sí. Hay una guerra civil", dijo la doctora Lisa, famosa por haber sacado personalmente a decenas de niños enfermos de las ciudades bombardeadas de Donbás y por haberlos trasladado a Moscú.
Los periodistas de Rossiyskaya Gazeta recuerdan ataques similares contra la famosa actriz Chulpán Jamátova, que se arriesgó a grabar un corto apoyando a Vladímir Putin en su última campaña electoral. Los críticos de Jamátova, creadora de una ONG que ayuda a los niños enfermos de cáncer, olvidaron todos sus méritos como actriz y todas sus obras de caridad para caerle en pandilla.
La doctora Lisa asegura que tampoco tiene nada que decirle a sus críticos, pues vive de otras noticias cada vez que vuelve a Moscú con un nuevo grupo de niños enfermos: hace poco en la página web de uno de los medios de prensa capitalinos apareció la información de que Moscú está dispuesto a entregarle un hospital.
Hasta el momento el fondo de Glinka contaba solo con un sótano en el centro de Moscú, una ambulancia y un pequeño rincón junto a la estación de trenes Paveletskaya donde la doctora Lisa atendía a personas sin techo y les organizaba almuerzos gratuitos.
A aquellas personas que necesitan atención médica más seria Glinka las ingresa en hospicios y hospitales estatales a través de amigos y conocidos, pero siempre recordando a las autoridades que Moscú necesita de centros sanitarios especiales para aquellos que carecen de vivienda.
Ahora en los planes de la inagotable doctora está la organización de un hospicio en Donetsk, para aquellas personas que ya no tienen fuerzas para sobrevivir en una ciudad que es bombardeada a diario.
