Conrad Murray, médico personal de Michael Jackson, fue declarado culpable de homicidio del cantante por la Corte Superior del condado de Los Ángeles, EEUU, informaron medios internacionales de noticias.
Tras tres semanas de liberaciones, los doce miembros del jurado que investiga la muerte del "Rey del Pop" ocurrida el 25 de junio de 2009 por una sobredosis de medicamentos declaró culpable de la muerte del cantante a su médico personal, Murray.
Según los investigadores, Murray dio al músico una sobredosis de la droga propofol, que en combinación con otras drogas incluidos sedantes causó la muerte del cantante a sus 51 años de edad.
Sin embargo, la defensa del médico afirmó que Jackson sufría de dependencia de sedantes y analgésicos y que el mismo tomó una dosis letal de propofol.
Durante la lectura del veredicto Murray permaneció sentado con cara seria. El juez encargado del caso, Michael Pastor ordenó arrestar de inmediato al médico que permanecerá en custodia y sin derecho a fianza hasta por lo menos el 29 de noviembre, cuando el tribunal emitirá su sentencia.
"El comportamiento irresponsable" Murray es una amenaza para la seguridad pública y por eso su detención "es apropiada", precisó el juez.
El fiscal David Walgren, declaró que Jackson, "pago con su propia vida" la negligencia criminal de su médico y que ese fallo, entre otras cosas, dejo sin padre a tres niños.
Murray, de acuerdo con el fiscal, violó la relación de confianza con el paciente, lo que condujo a su muerte y agregó que el médico violó el juramento hipocrático y sus obligaciones legales, al dar a Jackson propofol como sedante.
Por su parte, el abogado de Murray, Ed Chernoff, en discurso ante el jurado dijo que no existen evidencias que comprueben la culpabilidad de su cliente y trató de echar la culpa de la muerte de Jackson al propio cantante.
Antes, Murray, aceptó el hecho de que haber dado a Jackson una pequeña dosis de propofol pero declaró que no se considera culpable de homicidio.
Medios de comunicación locales dijeron que a la lectura del veredicto acudieron familiares de Jackson, entre ellos la madre del cantante Katherine y su hermana mayor, La Toya.
"Michael nos miró", declaró la madre del cantante al abandonar el palacio de justicia, donde dijo que nunca dudó que el resultado del proceso sería de acusación a Murray.
La calle en torno a la Corte, donde se liberó el caso, fue rodeado por cientos de seguidores de Jackson que después de conocerse la decisión del jurado, comenzaron a cantar "¡Gracias, Sr. Juez!".
Murray puede ser condenado a cuatro años de prisión y puede perder su permiso para el desarrollo de sus actividades médicas.
