El astro del fútbol Ronaldinho (Ronaldo de Asis Moreira) llegó este viernes a México para reforzar al equipo Gallos Blancos de Querétaro, fichado para cuatro torneos, a sus 34 años, hacia el final de su carrera deportiva marcada por su paso por el Barcelona y la selección de Brasil.
"Conozco muy bien el futbol mexicano porque mi hermano jugaba aquí y tengo muchos amigos que han jugado aquí. La decisión de venir a Gallos Blancos es porque creo que podemos hacer algo grande", dijo a los periodistas en un hotel capitalino donde fue presentado.
Con su conocida sonrisa enmarcada por sus rizos de cabello negro, el jugador prometió: "He venido aquí para ayudar a mi equipo a lograr algo importante".
Como un tributo a sus contratistas comentó: "He tenido posibilidad de ir a otros equipos de casi todo el mundo. Pero la comunicación que he tenido con mi hermano y con el presidente de Querétaro (Olegario Vázquez) me convenció para venir a México a continuar con mi victoria".
El fichaje del brasileño Ronaldinho con Gallos Blancos tendrá beneficios económicos para Querétaro y otros clubes de la liga MX de México. En los dos meses que restan de la campaña, el ex jugador del Barcelona puede atraer ingresos por 115 millones de pesos (unos 9 millones de dólares) por venta de boletos y camisetas, de acuerdo con círculos financieros deportivos.
México ha sido una plaza atractiva para jugadores que se aproximan a su retiro de las canchas, como el español Emilio Butragueño del Real Madrid, el chileno Iván Zamorano de la misma casa madrileña, el argentino Claudio López "El Piojo" del Lazio de Italia, el colombiano René Higuita, el brasileño Bebeto, o la leyenda alemana Bernd Schuster.
Mención aparte merece el catalán Josep Pep Guardiola, quien jugó sus últimos minutos en una cancha de México, para después ir a dirigir al club Barcelona más exitoso; y ahora comanda el Bayern de Alemania.
