El sistema antitanques Crisantemo, capaz de abatir un blanco a una distancia de seis kilómetros, fue la muestra estelar en la primera jornada de la Exposición de armamentos Oboronexpo 2014. El sistema se incluyó en el armamento del Ejército de Rusia en 2005, y ahora se ofrece en exportación a las fuerzas armadas de otros países.
Además, en la exposición se exhiben distintos modelos de armas de fuego, entre ellas la ametralladora Pecheneg-SP, la que integra el equipamiento de combate Rátnik, el soldado del futuro. La ametralladora Pecheneg-SP cuenta con un cañón recortado, provisto de un dispositivo silenciador.