Según Hayden, “la BPC trabajó en la realización de esos objetivos con el esfuerzo de los respectivos gobiernos, buscando posturas comunes para avanzar en el control de armamentos y la seguridad internacional, reforzar los vínculos en materia de defensa y creando posibilidades adicionales para estimular el comercio y las inversiones, combatiendo el terrorismo y el narcotráfico, apoyando el progreso en el ámbito de la ciencia, la tecnología y energética, como también, promoviendo los contactos sociales y culturales ente ambos países”.
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Tras recibir del secretario de Estado de EEUU, John Kerry, el informe de la BPC para 21013, el presidente de EEUU, Barack Obama, pidió al grupo de trabajo de la comisión profundizar y ampliar la interacción con Rusia para superar las barreras en el comercio y las inversiones, fortalecer la seguridad y potenciar la ciencia y las innovaciones.
Después de la adhesión de Rusia a la OMC, la BPC aprovechó la nueva situación para estimular el comercio bilateral y la inversión, promovió el intercambio de experiencias entre empresarios de los dos países y puso en marcha mecanismos de consulta encaminados a la homologación de las normas económicas e industriales utilizadas en Rusia y EEUU.
"… Y después, se dice que todo es malo en las relaciones ruso-estadounidenses. La mayoría de las personas que trabajan profesionalmente en el marco de la Comisión Presidencial Bilateral, no están de acuerdo con esta opinión, y gracias a Dios que no están de acuerdo, porque a veces es incómodo escuchar las declaraciones de algunos funcionarios: después de todo, se trata de dos potencias nucleares, que durante muchos años fueron rivales", subrayó la portavoz en su comentario.
